sábado, 31 de marzo de 2012

'Estoy en un momento de la vida en el que, entre la nada y la no exclusividad, prefiero quedarme con la nada'.


Me gusta estar a milímetros de tu boca. Se me paraliza hasta la última terminación nerviosa, hasta el último músculo de mi cuerpo. No sabría exactamente decirte porqué. Pero si en ese preciso instante me dices -VEN-, como dice la canción: lo dejo todo. O más bien, los dejo a todos.
Te echo de menos con ron y con cigarro incluido... Cuando me meto en la cama y cuando me despierto por la mañana. Sabor amargo y besos con un (des)conocido.
Pasado que vuelve los sábados de madrugada y los domingos de resaca... y tu -puta- voz que no se marcha.

miércoles, 7 de marzo de 2012

YO, YO Y YO.


Te odiaba los sábados y te echaba de menos los domingos. Los domingos de resaca y de película en la cama. Los de quedarme dormida mientras me acariciabas.
Me sentía vacía, algo así como si mi vida hubiera pasado por delante de mí en cuestión de segundos y se hubiera eliminado cada momento que he pasado a tu lado.
Suena sarcástico, pero los recuerdos vividos contigo, han sido exprimidos al máximo, sin ningún tipo de prejuicio ni miedo; pero actualmente TÚ no eres más que una sombra de cada uno de ellos.
Dejaste de ser un referente, un apoyo, y un abrigo cuando tenía frío. No te reprocho nada, de hecho, te lo agradezco.
El subconsciente, se queda con lo aprendido, y me he dado cuenta, de que es así como he crecido, y como sé, que lo voy a seguir haciendo.
Es cierto que a día de hoy, no puedo decir a ciencia cierta y poniendo la mano en el fuego, qué es lo que quiero, pero sí sé lo que no quiero, eso desde luego.